Cómo evitar la sequedad bucal

La sequedad bucal o xerostomía es la sensación de tener la boca seca. Se produce por una alteración del funcionamiento de las glándulas salivales las cuales provocan la disminución de saliva. La presencia de ésta en la cavidad oral es muy importante, porque gracias a ella se mantienen húmedos los tejidos orales. Esto facilita mucho acciones diarias como, por ejemplo, hablar o masticar e, incluso, la saliva cumple la función de limpieza en la boca. También regula la propia acumulación de bacterias. Tener el nivel de saliva adecuado ayuda a evitar la aparición de enfermedades bucodentales tales como caries, mal aliento o encías inflamadas, entre otras.

Los síntomas de la sequedad bucal son muy molestos y pueden llegar a perjudicar la calidad de vida. Lo primero que hay que hacer es descubrir la causa del problema, y para ello debes acudir a un especialista. El experto, realizará el tratamiento necesario adaptado a cada caso para que tu boca tenga el mejor estado de salud posible. La sequedad bucal es un problema que afecta al 20% de la población entre 18 y 30 años y a un 40% en las personas mayores de 50 años. Las mujeres son más propensas a sufrirla. Cada vez está mas presente en nuestra sociedad. Para evitar que la xerostomía siga aumentando, te mostramos algunas recomendaciones muy sencillas que puedes seguir para tener una boca perfecta:

Recomendaciones para evitar la sequedad bucal:

  • Mantener una buena higiene bucodental: para ello, debes tener mucha hidratación en la boca, intentar eliminar bebidas alcohólicas, no fumar y mantener una dieta con comidas suaves. Evita la ingesta de ácidos, picantes o comidas demasiado calientes para no irritar zonas sensibles.
  • Añadir a tu día a día bebidas sustitutas de la saliva como la leche o el agua. Beber pequeños sorbos de agua durante el día ayuda a mantener una buena salivación en tu boca.

Proteger tu boca con algún tipo de vaselina o protector labial para que no se resequen los labios. Si no están hidratados, la boca lo nota y se seca demasiado. Para ello, debes aplicarte la hidratación durante todo el día cada vez que lo encuentres necesario.

  • Consumir alimentos blandos como helados, zumos de frutas o yogures. El queso curado mantiene la boca bien hidratada debido a su alto contenido en calcio y fosfato.
  • Las frutas y verduras contienen lecitina, que reduce las bacterias de nuestra boca.
  • Otra opción son los humificadores de ambientes. Si pones uno en tu habitación, te permitirá por la noche reducir la sequedad de la garganta y la lengua.

 

Aquí os dejamos un articulo sobre más tratamientos de la sequedad de la boca.

Si tienes problemas de sequedad en tu boca, puedes seguir estas recomendaciones y poco a poco notarás la mejoría. Puedes visitarnos y te asesoraremos para que mantengas una buena salud dental, sin ningún tipo de compromiso.

 

¡Cuida tu sonrisa!